La comisión de seguimiento de las obras de la depuradora se reunieron en la mañana del miércoes 23 de junio en el ayuntamiento de Fresno el Viejo. En ella han participado el subdelegado del Gobierno en Valladolid, Emilio Álvarez; el director técnico de ACUAES, Jerónimo Moreno; y el alcalde del municipio, Luis Miguel Muñumer.
Tras la reunión han realizado una visita a las obras, que se iniciaron el pasado mes de abril con una inversión prevista de 1,1 millones de euros y han alcanzado el 15% de su ejecución en dos meses.
Posteriormente han realizado una visita a las obras, que se iniciaron el pasado mes de abril con una inversión prevista de 1,1 millones de euros.
En este tiempo se han acometido los trabajos de acceso a la parcela, la obra civil del tratamiento primario y las instalaciones de abastecimiento eléctrico y de agua potable a la parcela de la depuradora.
En los próximos meses, se trabajará en la ejecución de las balsas biológicas y en la red de conducciones internas de la planta, así como en las instalaciones y el edificio de pretratamiento.
Si se mantiene el actual ritmo de trabajo, la obra civil estará finalizada antes de que concluya el presente año, para realizar en el primer trimestre de 2022 las plantaciones de macrófitas, cuya misión principal es la de eliminar los contaminantes del agua residual. La depuradora estará operativa en abril de 2022.
La ejecución de este proyecto tiene como objetivo eliminar los vertidos contaminantes actuales a los cauces del arroyo Lanzón, garantizando el cumplimiento de la Directiva 91/271 sobre el tratamiento de las aguas residuales urbanas y consiguiendo una mejora medioambiental en Fresno el Viejo.
Además de la depuradora, el proyecto se completa con la ejecución de un emisario que conectará la red municipal de saneamiento con la nueva EDAR, así como sus obras auxiliares, aliviaderos y acometidas eléctricas.
La depuradora dará servicio a una población de 1.400 habitantes equivalentes, con una capacidad de tratamiento de 11,7 m3 /día. Consta de un primer desbaste del agua bruta para después pasar a un tratamiento primario mediante tanques anaerobios y un tratamiento biológico mediante humedales artificiales.
El proyecto está cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional FEDER 2014-2020, dentro del Programa Operativo Plurirregional de España (POPE).